Información interesante y curiosidades sobre los patos mandarines

Anonim

El pato mandarín es un ave cuyos machos se distinguen por su hermosa coloración. Por esta razón, las formas domesticadas de patos mandarines se crían como aves ornamentales. A continuación, se muestran algunos datos interesantes relacionados con este animal.

El hábitat natural de los patos mandarines es Manchuria, Sakhalin, Japón y el este de China. Están habitados por cursos de agua y lagos forestales. Además, Inglaterra también ha encontrado patos mandarines en fuga permanente.

Los patos mandarines son aves migratorias y nómadas. Se alimentan principalmente de plantas acuáticas, pero también de caracoles o insectos.

Tanto los patos mandarines machos como las hembras tienen plumas formadas en la parte posterior de la cabeza en una cresta característica. Los machos son mucho más coloridos que las hembras. Tienen picos rojos con franjas anchas de color blanco crema que se extienden desde la base hasta el ojo y la punta de la cresta. La frente contrastante y la parte delantera de la corona son de un tono de verde metálico, y la parte posterior de la corona y la parte posterior de la cabeza están oxidadas. La parte delantera del cuello y los senos masculinos son de color violeta metálico, con dos franjas blancas en la parte inferior. Hay espejos verdes en las alas. Las hembras, a su vez, son principalmente de color gris, animadas aquí y allá con detalles en blanco y negro.

Los nidos de los patos mandarines se encuentran con mayor frecuencia en huecos, grietas de rocas o ramas del tronco, en matorrales apartados y rara vez en el suelo. Estas aves también habitan voluntariamente cajas nido que cuelgan de los árboles. Se incuban de 9 a 12 huevos en la incubación durante aproximadamente un mes. Las crías pueden saltar de los huecos, incluso los que están muy por encima del suelo. Su plumón es tan grueso y ligero que los protege eficazmente contra los efectos de la caída.

Los patos mandarines, a diferencia de la mayoría de las especies de patos, no se zambullen. Recogen comida de la superficie del agua.

En China, las parejas de patos mandarines se consideraban un símbolo de fidelidad, porque se emparejan de por vida. También se creía que cuando uno de ellos muere, el otro pato muere de dolor.

Los patos mandarines llegaron a Europa como aves reproductoras ornamentales en el siglo XVIII.